Skip to main content

Building Healthy Sleep Habits

Isn’t sleep just the best? As a parent, though, it quickly becomes clear that the restful nights once taken for granted are now a rarity. Many find that they’re much more pleasant after a good night’s sleep. Establishing a helpful bedtime routine has been key. With a young child, nighttime wake-ups are still expected, but when quality rest is achieved, it’s a welcome relief. It’s all about navigating this sleep-deprivation phase with a sense of humor and, of course, a strong cup of coffee!

 

 

Dear CPI,

Bedtime with my 3- and 5-year-olds is such a struggle. They refuse to stop playing and pick up their toys. They take forever to get into bed, then they get up often– they’re thirsty, scared, heard a noise, too hot, too cold. I know they’re just trying to avoid going to sleep. I have to tell them to be quiet many times before they finally fall asleep. We’re always tired and cranky in the morning. How can we make bedtime easier?

Nadia

Dear Nadia,

Oh, bedtime battles. For many families, bedtime is stressful instead of a calm, loving way to end the day. And the bedtime struggles can lead to challenges during the day. Children who do not get enough sleep are often tired, irritable, moody and have difficulty concentrating. This can affect their behavior at home and school. Parents and caregivers can become exhausted, stressed and lose their patience more easily. Here are a few tips to help your children develop healthy sleep habits that will benefit the whole family:

Identify possible causes of bedtime difficulties. Some children have difficulty falling asleep on their own when they’ve always been rocked, held or fed until they fall asleep. Other children have a hard time settling down if they haven’t had enough physical activity or they’ve had too much activity before bedtime. Fears, anxiety or stress can also keep children awake. Sometimes, parents accidentally encourage poor sleep habits by giving in to what children want (stay up later, watch more TV) to avoid arguments. These are just a few of the things that can affect children’s bedtime behaviors.

Follow a consistent bedtime routine. Consistent, predictable routines help children make the transition from being active during the day to being calm and quiet at night. Review your kids’ bedtime routine with them and discuss whether to add or change any steps. Here’s an example of a bedtime routine:

  • Play quietly before bedtime
  • Brush teeth
  • Go to the bathroom
  • Go to bed at the set time
  • Read a book
  • Say goodnight
  • Stay in bed until the morning

Prepare your children to follow the routine. Write a list, draw or print pictures that show each step of the routine. Talk about each step and have your kids pretend to do each step before it’s actually bedtime. This allows your children to practice the routine when everyone is calm.

Help them transition from daytime to nighttime. At least 30 minutes before bedtime, tell your children they will be going to bed soon. Turn electronics off and engage them in a quiet activity such as puzzles, coloring or reading. Then 10-15 minutes before bedtime, tell your children it’s time to finish up the activity. Give them a clear, calm instruction to start their bedtime routine — “It’s time to get ready for bed. Please go brush your teeth.”

Give descriptive praise when your children follow the bedtime routine. This lets your children know you’re noticing their efforts, which encourages them to keep trying. Descriptive praise works best when it’s specific, sincere and focuses on the behavior you want to see more of. For example, “You’ve brushed your teeth and gone to the bathroom. You’re doing a great job following the bedtime routine!” In the morning, give more descriptive praise if your child stayed in bed the whole night.

Final Thoughts: There’s a reason why sleep is a basic human need. Our bodies and brains need time to rest and prepare for the next day. Developing positive bedtime routines is one way to help children develop healthy sleep habits that will last a lifetime. It’s a gift for both children and parents.

EN ESPANOL

¿No es el sueño lo mejor? Sin embargo, como padres, rápidamente se hace evidente que las noches de descanso, que antes se daban por sentadas, ahora son una rareza. Muchos descubren que son mucho más agradables después de una buena noche de sueño. Establecer una rutina útil para la hora de dormir ha sido clave. Con un niño pequeño, los despertares nocturnos aún se esperan, pero cuando se logra un descanso de calidad, es un alivio bienvenido. Se trata de navegar esta fase de privación de sueño con sentido del humor y, por supuesto, una buena taza de café.

Querido CPI,

La hora de dormir con mis hijos de 3 y 5 años es una lucha. Se niegan a dejar de jugar y recoger sus juguetes. Les toma una eternidad meterse en la cama, y luego se levantan a menudo: tienen sed, están asustados, oyeron un ruido, tienen calor, tienen frío. Sé que solo están tratando de evitar dormir. Tengo que decirles que se callen muchas veces antes de que finalmente se duerman. Siempre estamos cansados y de mal humor por la mañana. ¿Cómo podemos hacer que la hora de dormir sea más fácil?

- Nadia

Querida Nadia,

Oh, las batallas de la hora de dormir. Para muchas familias, la hora de dormir es estresante en lugar de ser una manera tranquila y amorosa de terminar el día. Y las luchas de la hora de dormir pueden llevar a desafíos durante el día. Los niños que no duermen lo suficiente a menudo están cansados, irritables, de mal humor y tienen dificultades para concentrarse. Esto puede afectar su comportamiento en casa y en la escuela. Los padres y cuidadores pueden sentirse exhaustos, estresados y perder la paciencia más fácilmente. Aquí hay algunos consejos para ayudar a tus hijos a desarrollar hábitos de sueño saludables que beneficiarán a toda la familia:

Identifica las posibles causas de las dificultades para dormir. Algunos niños tienen dificultades para quedarse dormidos por sí solos cuando siempre han sido mecidos, sostenidos o alimentados hasta que se duermen. Otros niños tienen problemas para calmarse si no han tenido suficiente actividad física o han tenido demasiada actividad antes de la hora de dormir. Los miedos, la ansiedad o el estrés también pueden mantener a los niños despiertos. A veces, los padres, sin querer, fomentan malos hábitos de sueño al ceder a lo que los niños quieren (quedarse despiertos más tarde, ver más televisión) para evitar discusiones. Estas son solo algunas de las cosas que pueden afectar el comportamiento de los niños a la hora de dormir.

Sigue una rutina consistente para la hora de dormir. Las rutinas consistentes y predecibles ayudan a los niños a hacer la transición de estar activos durante el día a estar tranquilos y calmados por la noche. Revisa la rutina de dormir de tus hijos con ellos y discute si agregar o cambiar algún paso. Aquí hay un ejemplo de una rutina para la hora de dormir:

  • Jugar en silencio antes de dormir
  • Cepillarse los dientes
  • Ir al baño
  • Ir a la cama a la hora establecida
  • Leer un libro
  • Decir buenas noches
  • Quedarse en la cama hasta la mañana

Prepara a tus hijos para seguir la rutina. Escribe una lista, dibuja o imprime imágenes que muestren cada paso de la rutina. Habla sobre cada paso y haz que tus hijos finjan hacer cada paso antes de que realmente sea la hora de dormir. Esto permite que tus hijos practiquen la rutina cuando todos están tranquilos.

Ayúdalos a hacer la transición del día a la noche. Al menos 30 minutos antes de la hora de dormir, diles a tus hijos que pronto irán a la cama. Apaga los electrónicos y involúcralos en una actividad tranquila como rompecabezas, colorear o leer. Luego, 10-15 minutos antes de la hora de dormir, diles que es hora de terminar la actividad. Dales una instrucción clara y calmada para comenzar su rutina de dormir: “Es hora de prepararse para la cama. Por favor, ve a cepillarte los dientes.”

Brinda elogios descriptivos cuando tus hijos sigan la rutina para dormir. Esto les hace saber que estás notando sus esfuerzos, lo que los anima a seguir intentando. Los elogios descriptivos funcionan mejor cuando son específicos, sinceros y se centran en el comportamiento que quieres ver más. Por ejemplo: “Te has cepillado los dientes y has ido al baño. ¡Estás haciendo un gran trabajo siguiendo la rutina para dormir!” Por la mañana, brinda más elogios descriptivos si tu hijo se quedó en la cama toda la noche.

Pensamientos finales: Hay una razón por la cual el sueño es una necesidad humana básica. Nuestros cuerpos y cerebros necesitan tiempo para descansar y prepararse para el día siguiente. Desarrollar rutinas positivas para la hora de dormir es una forma de ayudar a los niños a desarrollar hábitos de sueño saludables que durarán toda la vida. Es un regalo tanto para los niños como para los padres.

CPI's monthly parenting article provides tips for families raising children, based on the world-renowned Triple P – Positive Parenting Program, available in Sonoma County at CPI. If you have a question or idea for a future column, please email anneb@calparents.org

El artículo mensual sobre crianza de CPI proporciona consejos para las familias que crían niños, basados ​​en el programa de crianza positiva Triple P de renombre mundial, disponible en el condado de Sonoma en CPI. Si tiene una pregunta o idea para una columna futura, envíe un correo electrónico a anneb@calparents.org

Socios comunitarios